domingo, 19 de junio de 2011

The Human Centipede


Estrenamos apariencia en Mouth on Fire! y qué mejor para empezar esta nueva etapa que con un clásico. Una obra maestra de la tontunez: The Human Centipede, el ciempiés humano.
Pocos sabéis de la existencia de esta película. Los que habías oído sobre ella dudabais de su credibilidad. Muchos creen que son leyendas urbanas, que nadie es capaz de hacer nada similar. Sólo una minoría pervertida y ociosa han arriesgado su integridad viéndola. Aquí me encuentro yo, Casper Mondriani, un héroe que os la va a contar. No me deis las gracias, yo soy así... 

Seré breve con el argumento. Esto va de un cirujano que secuestra gente para crear una especie de ciempiés humano. Tres personas que compartan un sólo sistema digestivo. Básicamente cose bocas en culos. Nunca pongo imágenes en mis criticas, pero haré una excepción para que me comprendáis.


Aquí lo tenéis. ¿Entendéis ahora el proyecto? Meteos en google imágenes para más detalles.  Bueno pues éste señor de la bata es el cirujano loco. Una especie de doctor Mengele pero conduciendo un Mercedes (ahora que lo pienso es posible que Mengele condujese un Mercedes). En este momento les está pasando unas diapositivas a sus llorosos pacientes de cómo será la operación. Atended a la calidad y al alto grado de detalle de las diapositivas. Qué minuciosidad, yo me sentiría seguro en manos de un cirujano así.

Pues de esto va la peli. El colega cirujano (habréis deducido que no sé como se llama) se dedica a esto en su vida. Va por ahí con su cacho de Mercedes, su gabardina y con una escopeta de tranquilizantes secuestrando gente. Los lleva a su super chalet en medio del bosque y juega a ser el dios del bisturí. Lo que viene siendo el típico malo de película. ¿Y por qué hace todo esto? Por autosuperación. Él no es como vosotros, unos don Nadie. Él se reta diariamente. Es un triunfador. Lo que pasa es que una vez consigue su objetivo de crear esta especie de monstruito, no sabe muy bien qué hacer con ellos.
Aquí pasamos a la parte de coña de la película. Bueno en realidad toda la película es de coña, pero bueno, esto más. El cirujano ya ha creado a su ciempiés. Está formado por dos chicas y un japonés. Éste es el único que puede hablar (es el que va delante y no tiene un culo en su boca) pero no sabe hablar más idiomas que el suyo propio. Así que tenemos a una bicho que grita insultos en japonés y que se tira las veinticuatro horas del día sollozando. Claro, el cirujano ve poca utilidad en esto. Así que decide que ya tiene mascota para que le lleve el periódico y las pantuflas por la mañana.

Esto es básicamente "The human centipede". Una película que no viene a cuento, que no entiendo cómo dejan que la gente haga este tipo de cine. Debería existir una ley en la que si haces una película tan mierda y tan sinsentido se pudiese denunciar al director y mandarle a la cárcel. Escrita y dirigida por un tal Tom Six al que sólo tengo una cosa que decirle: hijodeputa.

Lo mejor:
Lo peor: Ahora te pica la curiosidad por ver esta peli.
Conclusión: Te preguntarás ¿qué pasa cuando cagan?

domingo, 12 de junio de 2011

Justicia Extrema


 He decidido tomarme una pequeña licencia creativa y voy a comentar una serie de televisión que vi el otro día por la tele. Ya sé que se supone que esto es sólo de críticas de cine, pero el blog es mío y puedo hacer lo que quiera con él. Además no es una serie cualquiera, es la única en el mundo protagonizada y producida por el más grande: Steven Seagal.

No sabía de su existencia hasta el jueves pasado y fue una experiencia increíble. Para todos los amantes del buen cine del tío Seagal, esto es el paraíso. Aquí el susodicho actor tiene carta blanca para hacer lo que le plazca y ,sobre todo, para enseñarnos su gran abanico de registros.

1º Steven Seagal amigo. Hay momentos en los que la pluma es más fuerte que la espada (¿?) y Uncle Steven lo sabe. En un momento de la serie, un pobre hombre armado con una escopeta asalta un banco porque le van a embargar la casa. Este hombre (llamémosle Joe) en realidad no quiere hacer eso. Joe es un don nadie desesperado. Ha perdido a su mujer e hija, y lo único que le queda es su casa. Cómo último y desesperado recurso le queda asaltar el banco entre sollozos. Ante esta situación, ¿qué hace Steven? ¿le parte los  brazos? ¡No! Steven comprende la situación y empatiza con el pobre asaltante. Perfectamente podría arrancarle la nuez (todos sabemos quién tiene las de ganar, un señor armado con una escopeta o Steven Seagal armado con sus manos). Pero Steven sabe por lo que está pasando el desdichado Joe. Aquí sale el Steven Seagal amable. Steven Seagal comprensivo. Steven Seagal piadoso. Steven Seagal zen. Steven Seagal humano. Una mano amiga. Al final, Joe comprende que la violencia no es el camino y que haciendo daño a los demás no conseguirá nada positivo. Aprended, niños del mundo.

2º Steven Seagal ajusticiador. Pero no es oro todo lo que reluce. Hay ocasiones ligeramente más complicadas y donde hay que tratar con gente un pelín más peligrosa. Steven Seagal se enfrenta a esta situación (atención que no me invento nada): La mafia japonesa de los Yakuza se alía con la mafia americana. Juntos, tirotean un almacén de drogas de la Mara Salvatrucha  para hacerse con el control de la ciudad y poder exportar explosivos C4 a Oriente Medio. Ante este panorama (de dificultad media-baja para Steven) no tienen cabida las palabras.  Esta gente son ovejas descarriadas. Herejes sin rumbo que han de ser ajusticiados a base de tiros y de miembros fracturados. Y por si esto fuera poco, colofón final. Pelea face to face entre el capo Yakuza (armado con una katana) y Steven (armado con sus manos). De sobra conocemos el resultado del combate.

Doy gracias a Dios por esta serie 100% Steven. Una serie donde el resto de actores apenas hablan. Una serie que gira entorno al mismo eje ceporro. Y por si fuera poco, después ponen un reality donde el propio Steven Seagal patrulla por las calles con policías de verdad.
Todo esto gracias a Antena Nitro. La cadena de Antena 3 dedicada a los hombres. A hombres machos y recios que esperan ansiosos ver hostias a chorro. Y quién mejor que el Mesías Seagal para saciar nuestras ansias de tortas. Gracias de nuevo Antena Nitro. Tras aquel empacho de buena programación viril note un ligero aumento en el tamaño de mi pene y notables erupciones de vello pectoral.

Lo mejor: Steven Seagal ajusticiador.
Lo peor: Steven Seagal amigo.
Conclusión: Si todos fuésemos como Steven Seagal, el mundo sería un lugar maravilloso. Con una industria del cine pésima, pero por lo demás, maravilloso.

martes, 7 de junio de 2011

Furia Ciega


Drive Angry

Dirección: Patrick Lussier
Reparto: Nicolas Cage, Amber Heard, William Fichtner, Billy Burke,
Año: 2011

Película de Nicholas Cage.
Sólo eso debería ser un género por sí sólo. Y da igual de qué vaya, porque todas contienen algo especial, algo único y común….el carisma arrollador, el poderío actoral y la variedad de peinados de un hombre apabullante: NICHOLAS CAGE, dueño de la mejor mirada perdida de la historia. Tanto, que actualmente es el único recurso que usa.

Celebérrimo sobrino de Mr. Coppola, Nicholas Cage lleva un tiempecillo algo perdido. Más o menos una década. No es que no trabaje, se parte el lomo, pero de manera algo irregular. En 2007 hizo cuatro pelis. En 2008, una. En 2009 puso el turbo e intrepetó cinco papeles.
No voy a analizar su carrera, pero parece ser que debido a ciertos problemas económicos (tuvo que vender varios castillos, pobre de él), se mete en todo film que se le ponga por delante. Me imagino una conversación con su agente, supongo que será algo así:

-Nicholas Cage: ¡Smith! ¡Acuda presto! ¿Qué me toca rodar esta semana?
-Smith: Pues nos han llegado varios guiones a la oficina right now…

-Nicholas Cage.: Dime de qué van por orden de llegada al buzón.

-Smith: Una adaptación de un cómic chusquero, uno de tiros de serie B, una de aventuras de serie B, uno de brujas y brujos, uno que mezcla todo lo anterior y uno que es un maravilloso drama de época con profundos personajes y oscarizable hasta las cejas…

-NC: Vale, pues confirma las cinco primeras.
-S: Es probable que no sea lo mejor ahora mismo, señor Nicolascage…
-NC: ¡Chst! A mi no me repliques que te meto, ¿Eh?.

Pues eso y a lo que vamos, FURIA CIEGA. ¿Puede salir una película mala con semejante maravilla de título? Si, puede. Steven Seagal da fe de ello.
El caso es que el guión de Furia Ciega está sacado de un bombo lleno de guiones. Porque si no, no se entiende que llegaran a rodar esto, de lo mala que es. Atentos, no se me pierda nadie:

Milton (a secas, Milton), es un exdelincuente que se escapa del infierno en un coche para ir a vengar la muerte de su hija a manos de una secta satánica y de paso, rescatar a su nieto, al cual quieren sacrificar. Pero un empleado de Belcebú le persigue insaciable. En el camino, encontrará aliados y enemigos, momentos de gloria y escenas míticas, que…bueh, imposible creérselo. ¿A que no?

El caso es que podría haber salido una película entretenida, que en estos tiempos sería algo de agradecer visto el listón, pero no ha sido así. Ha salido un cagarro monumental, lleno de idioteces y momentos en los que levantar la ceja en claro síntoma de que nos están tomando el pelo (y a mí ya no me queda mucho).

Empezamos con un pequeño “prólogo”, por llamarlo de alguna manera, en el que vemos las profundidades infernales. Bastante mal hechas, por cierto. Mientras nos regocijamos con tanto paraje 3Dístico (porque si de algo va sobrada esta peli es de cosas en 3D que te saltan a la cara…), una voz en off nos va contando chorradas que no nos interesan y que olvidaremos un cuanto veamos al coche de Milton escapar por un portón y enfilar los páramos infernales. Créme de la Créme. ¿Alguien ha dicho Ghost Rider?.


Nuestro héroe con algo que explota un poco más atrás.


En fin. La cosa es que la película se desarrolla en los EEUU (no podía ser de otra manera, por supuesto) concretamente en uno de esos estados que no nos importan lo más mínimo. Uno que está lleno de paletos. Sí, ese. Y en ese estado de paletos, hay una secta satánica de paletos, dirigida por el malo más cutre de la historia de la humanidad. De hecho, hay veces durante la peli que te dices: “Ah, ése era el malo”. Y a otra cosa.


Malo random.

Punto número 1: La chica. La que sale en el cartel. Cuerpo bonito, nada de cerebro y menos personalidad aún. Se une al periplo de nuestro héroe (a la odisea, que diría mi amigo Casper Mondriani) casi, casi porque sí. Al principio Milton (N.C. para los amigos) salva a la chica de su iracundo prometido. Pero ya. Eso no justifica para nada que en el berenjenal de tiroteos, persecuciones, desmembramientos siguiente la chica aguante ahí por cariño al protagonista. Imposible creérselo.


Maquillaje perfecto ever,
no importa qué explote cerca.



Punto número 2: Nicholas Cage. Ahora en rubio, complete su colección. Básicamente el mismo jeto toda la película, mismas frases lapidarias, nula expresividad y además, es indestructible. ¡Porque está muerto! ¡No se le puede matar! En un momento de la peli le pegan un balazo en el estómago, cosa que nos da igual. Se cura por arte de birlibirloque y en otro momento le pegan un tiro en el ojo. Katakroker.

Punto número 3: El demonio que le persigue. Con la cara del agente del FBI de Prison Break. Viste exactamente igual y actúa igual que en dicha serie. No sirve nada más que para meter prisa al protagonista. Primero quiere pillarle, pero luego le ayuda sin ton ni son. Resulta que la secta esa quiere instalar el infierno en Tierra. Y parece que eso al Diablo (en una alegre incoherencia) no le gusta lo más mínimo. También hay por ahí un arma que NC ha robado del infierno (infierno de seguridad mínima, por lo que veo), que puede matar dioses y demonios, cosa que tiene al ser este muy preocupado. Oh. Así que hala, a ayudar.


Y viste igual. Qué clase.


Punto número 4: Despropósitos a mogollón.
Creo que no voy a desgranar toda la película, total, para qué. Voy a describir un par de escenas de las que me acuerdo y ahí os arregléis.

Escena I’m the big modafacka.
En un motel, Nicholas Cage fornica apasionadamente, es decir; vestido y fumando un Habano (¡) con un señora de vida alegre. Sin previo aviso, los malosos aparecen en la habitación, pero NC no se inmuta. Sin parar de hacer bebés (al loro, eh), agarra la recortada y se lía a tiros, mientras la amiga se deshace en orgasmos. Oh my god. Cine en estado puro.
Además, un malvado tira un hacha, NC gira la cabeza y el hacha le corta UN pelo. Eso, obviamente, significa muerte en el país de NC.

Escena de la caravana.
Tras recibir un disparo en el ojo, NC se muere…pero estaba muerto. Además, no se le puede matar…El caso es que está muerto, y luego no. No lo entiendo. Bueno. El caso es que los malos aprovechan para llevarse a la chica, para algo tan inocente como una violación en grupo o destripamiento ritual, pero al final na de na. El caso es que NC resucita, coge un coche y a perseguir la caravana. Lo gracioso es que en cada plano hay menos gente dentro, hasta que al final, de 6 o 7 secuaces, se quedan sólos la chica y el malo. Y se pegan. Y en un alarde de originalidad, la chica salta temerariamente por la ventana de atrás ¿Para estrellarse contra el asfalto? ¡No! Para caer dentro del coche de NC. Aay, éste NC, siempre en todo.


Milton en todo su esplendor


Escenas I’m the fackin boss
Pues casi cualquiera. Todos los coches explotan, rebotan, o vuelan cientos de metros. Pero a eso estamos acostumbrados. Al final, la secta se reúne en el patio de una vieja cárcel de cartón piedra para sacrificar al bebé. Nicholas Cage aparece volando con su coche, se da dos vueltas y mata a todo el mundo. Y el malo también muere. No gana, eh; que lo sepáis.
El bebé es recuperado y entregado a la chica ¡Bien!
El demonio consigue lo que quería, ayuda a NC y éste cumple su promesa de no matarle ¡Bien!
NC, o sea, MILTON, vuelve al infierno para volverse a escapar ¡Bien!


Cara estreñida, siempre funciona.


Resumiendo, un mojón inconmensurable, ridículo y pastillero a tope. Coherencia exigua, personajes que no nos importan los más mínimo, trama estúpida e inconexa, explosiones, muertos, muertos vivos, demonios, rednecks, culos, tetas, tiros, coches… Al tope de la Imdb en dos días.

Lo mejor: Creo recordar que tenía una buena banda sonora….Y ya.
Lo peor: El pelo rata de Nicholas Cage.
Conclusión: El día que queráis tirar dos horas de vuestra preciosa vida a la basura, ésta es vuestra peli.